5 de febrero, 2024
Una frase bien “vendida” por los voceros oficiales generó una expectativa engañosa respecto a la vacuna contra el Dengue, en la provincia de Corrientes. El gobernador Gustavo Valdés, en declaraciones radiales, dijo que mantendrá un encuentro con laboratorios que fabrican la vacuna y que Corrientes elaborará un plan. Pero la realidad es que no hay vacunas disponibles y que Corrientes no tiene un plan de vacunación masiva de la población como sí lo tienen otras provincias del Norte Grande.
“El lunes o martes estaremos recibiendo a los representantes del laboratorio” dijo Valdes, sin dar mayores detalles, luego admitió que “no hay vacuna suficiente, por más de que quisieran, no hay cantidad y no hay volumen. Todas las entregas son programadas a larguísimo plazo. Nosotros estamos preparando el plan y vamos a ver cómo afrontamos con vacuna el año que viene (2025)”.
Otras provincias como Salta y Misiones -de características similares a Corrientes-, lanzaron campañas propias de inmunización contra el dengue, además de fuertes estrategias publicitarias para concientizar a la población sobre la prevención en sus hogares. En Corrientes la sensación es que este brote tomó desprevenido al Ministerio de Salud Pública; que el Gobierno Provincial apostó todas sus fichas a que la Nación se haga cargo (en la logística de vacunación, la compra y el pago al personal) y no desarrolló una estrategia propia; y que, ahora las cosas parecen irse de las manos, ruega que pare el calor y llegue el frío para que bajen los contagios.
“Estamos viendo la compra de vacunas programadas. Hoy vacunar a todos los correntinos de golpe no es posible. Vale 55 millones de dólares (46.530 millones de pesos). Aparte tenés que tener una programación. Es difícil” admitió el Gobernador, en declaraciones a Radio Dos, enterrando la posibilidad de una campaña de inmunización en Corrientes.
Así, como siguen las cosas los correntinos y correntinas deberán afrontar este brote de dengue con repelente, mosquitero y espiral; quedan largos meses de altas temperaturas. Hay que cuidarse porque los contagios crecen.